Cuando la pandemia es mental

Siempre hay luz en la oscuridad, en cualquier oscuridad, en las palpables y en las sentidas, en las imaginarias y en las reales, en las masas y en las personales. La corta experiencia humana muestra que ya antes se pasaron por lo que se pasa en el presente, aunque en el antes no se supiera dar nombre a lo que pasaba, y aunque en el presente no sepamos aprender del pasado para construir nuestro futuro. Sólo algunos pocos son conscientes en plenitud del antes, del ahora, y del próximo después, o al menos lo intentan. No se vive mejor ni peor con esta carga de consciencia, pero al menos ayuda para tratar de evitar caer contagiado en las estupideces circundantes, o de entre todas, poder tratar de elegir uno mismo aquellas estupideces que nos hacen dormir más mecido y arropado cada noche.